En la concentración de vecinos y cívicos efectuada ayer en la plaza Andrés Ibáñez del Plan Tres Mil, que contó con la presencia del prefecto del departamento, Rubén Costas, los dirigentes recordaron los pactos propuestos en anteriores cabildos; también expresaron su apoyo al pueblo de Cochabamba, a la democracia, a la paz y pidieron al Gobierno que desista con su intento de tumbar a las autoridades elegidas por el voto popular.
Más de 10.000 personas desafiaron al mal tiempo y a las amenazas de enfrentamientos de algunos dirigentes masistas. Así expresaron su respaldo a la dirigencia del Comité pro Santa Cruz que el pasado viernes, en la Asamblea de la Cruceñidad, desistió de llevar adelante un paro cívico y aceptó la sugerencia de las juntas vecinales de concentrar a la gente en esa populosa zona, donde la mayoría de los habitantes son del interior del país. En su discurso, el presidente del Comité Cívico, Germán Antelo, recordó que la región ha propuesto a los gobiernos tres pactos. El político, con una reforma del sistema y con autonomías departamentales.
El pacto productivo, que genere empleos para que los bolivianos dejen de emigrar masivamente. El pacto social en el que se ratifique que no habrá violencia entre bolivianos y se dé el libre tránsito por el territorio nacional. Antelo atacó la intentona de cambiar a los prefectos elegidos, los mismos que son el resultado de la lucha cívica cruceña. Además, resaltó que la concentración de ayer era por la democracia y la autonomía y no por la confrontación. “El poder está en ustedes que son el pueblo y este pueblo eligió a sus autoridades”, recordó.
El dirigente vecinal Rodolfo Landívar calificó de exitosa la reunión, pues pese a las amenazas de algunos dirigentes del MAS, la gente no les creyó y se dejó llevar por el mensaje de tranquilidad. “Aquí en Santa Cruz no se genera odio ni confrontación, aquí se genera armonía y bolivianidad”, dijo. El dirigente vecinal del Plan Tres Mil, Luis Hurtado, cuestionó al concejal alteño Roberto de la Cruz, que en días pasados llegó hasta esa zona para hablar de una refundación y de querer convertirla en otro municipio. “También habló de tomar nuestras cooperativas que son producto del trabajo de los cruceños”, añadió. Blanca Menacho, de la Villa Primero de Mayo, le dijo a De la Cruz que venga a Santa Cruz para llevar proyectos y se los entregue a Evo Morales.
A su turno, el dirigente organizador del evento, Víctor Pardo, pidió un minuto de silencio por los dos caídos en Cochabamba, exigiendo paz, pero a la vez advirtiendo que no se metan con la Prefectura cruceña. El representante de la Pampa de la Isla, Wálter Pizarro, dijo que no es con fusiles que se construye un país, “se lo hace con democracia”. El prefecto Rubén Costas, que no habló en la concentración, dijo sentirse contento porque fue una fiesta democrática, sin enfrentamientos. “Aquí no hay regionalismo, aquí está el laboratorio de la nueva Bolivia. Aquí hay gente de todas las clases y eso es Santa Cruz”, agregó.
Fuente: El Deber
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